se que me he prometido a mímisma vivir el presente y no ser presa más de mis futuros imaginarios que se asientas en cimientos inexistentes de realidades inciertas; pero a veces la mente se me va.
Javi esta semana se ha ido a hacer alpinismo...adoro y odio su gusto por los deportes extremos y paises belicosos a partes iguales, pero es un gran chico y parece ser ese su único defecto asi que me considero afortunada. Ese es el problema, me considero afortunada y no puedo evitar pensar en ese año en el que la estatua de la libertad me gana la batalla por su corazón.
Le quiero tanto que puede más eso que el hecho solo de plantearme que la que se queda en una vida monotona en el mismo país, en la misma ciudad con la misma gente los mismos libro y el mismo encierro soy yo. Pero y a pesar de mi lucha por la autodeterminación de cad auno en la pareja, querer inevitablemente crea lazos de dependencia y yo soy una yonky de sus besos, soy adicta al olor de su piel cuando duermo con él y respiro en su cuello, me entretiene hasta limites insospechados, me hace reir, me da paz, en el encuentro amigo y amante, me escucha, me entiende, me aguanta y me frena cuando mi mente estresada se acelera.
Hace 2años que nos conocemos y 8 meses como pareja y en ese tiempo no ha habido una semana en la que no hayamos intercambiado un mail.
Distancia no es olvido, lo sé, pero es distancia...y lo que me asusta no es que conozca a alguien, eso puede pasar en cualquier sitio, lo que me asusta es que la distancia, distancie.
Tras 4años de infructuosa y penasa relación a distancia jmás pensé que tendría que comerme mis palabras sobre negaciones de repetición de conductas, claro que tampoco pensaba que iba a encontrar algo por lo que merecia la pena volver a pecar.
Asi que una vez más la vida me pide, fluir, creer, confiar, dejarme llevar y asumir lo que sea que seráque desde luego será por algo y será perfecto. En un último intento de transmutar como un alquimista de la energia lo malo en lo bueno he puesto en mi mesa de estudio una foto de una chica en un mustang en el desierto del colorado, y no hay un solo dia que no la mire y me vea en esa ruta 66 idilica planeada con javi en un verano en el que yo ya soy juez y él un poco mas inteligente si cabe.